El Borussia Dortmund va a jugar la final de la Liga de Campeones 2023-24 tras ganar este martes al Paris Saint-Germain (0-1) en el partido de vuelta de las semifinales, en el que un gol Mats Hummels, uno de los únicos supervivientes de la final de 2013, bastó a los de Edin Terzic para disputar el duelo terminante por la segunda 'Orejona'.

Hasta 4 veces, 6 en toda la eliminatoria, repelió la madera los disparos de los de Luis Enrique, que nuevamente zozobraron en su objetivo de conquistar su primera 'Champions'. Los de Edin Terzic supieron soportar, emulando el 'muro amarillo' que rige en su campo, y con esto retornarán a su primera final desde 2013, año en el que cayeron frente al Bayern de Múnich (2-1).

Ahora, van a tratar de conseguir su segundo título tras el de 1997, cuando se impusieron a la Juventus (3-1), ante Real Madrid o Bayern de Múnich, que resolverán este miércoles la segunda semifinal. Luis Enrique apostó por Gonçalo Ramos como '9', favoreciendo que Mbappé pudiera caer por banda.

Exactamente, el portugués fue el primero en intentar intranquilizar al conjunto alemán con un disparo, tras centro desde la derecha de la estrella francesa, que terminó en las manos de Gregor Kobel. Pese a todo, los germanos parecían cómodos sobre el césped del Parque de los Príncipes, replegando líneas, siendo conscientes de que la paciencia era su mejor aliado. Mientras que, los parisinos, que meridianamente disfrutaban del control del esférico dirigidos por Fabián Ruiz y conectaban pases de seguridad, adolecían de fluidez en el último tercio del campo. En verdad, Dembélé probó fortuna con un disparo que apenas intranquilizó al portero visitante, que detuvo en dos tiempos un chut de Vitinha desde lejos cerca del reposo.

El Dortmund, que en el minuto 19 informó con un remate del lateral noruego Julian Ryerson que se fue lamiendo el palo, tuvo la más clara de la primera mitad en una contra de Adeyemi, que se plantó ante Donnarumma; el italiano se impuso en el codo con codo.

Considerablemente más conectado salió el cuadro francés en la segunda parte. Con considerablemente más verticalidad, trató de producir desequilibrios y a punto estuvo de hallar premio a los dos minutos, mas el poste repetió la ocasión de Warren Zaïre-Emery. La contestación de los de Terzic no tardó en llegar.

Fue en el minuto 50, en un saque de esquina botado por Julian Brandt al segundo palo; allá, uno de los supervivientes de la final de 2013, Mats Hummels, recibió el centro y, de cabeza, mandó el balón en el fondo de las mallas frente al silencio del Parque de los Príncipes.