El tenista noruego se quedó con el enfrentamiento escandinavo frente al danés Holger Rune en 4 parciales (6-1, 4-6, 7-6(2)), 6-3) en su duelo por los cuartos de Roland Garros. Ruud se va a cruzar con Marin Cilic por el pase a la final en la ciudad de París. Gran duelo escandinavo para dos jugadores que llegaban por vez primera a unos cuartos en Grand Slam. Casper Ruud venía como preferido en este partido y asimismo para ser finalista por la parte baja del cuadro, como octavo cabeza de serie. El noruego traía un enorme ritmo de las rondas precedentes, donde tuvo bastantes pasajes de sufrimiento, sobre todo ante Sonego en tercera y ante Hurkacz en octavos.
Por su parte, Holger Rune venía con una semana de ensueño en apenas su tercer main draw en campeonatos de este calibre, mostrando que su potencial ya es una Realidad. El danés pudo dejar en el camino a dos sembrados como Denis Shapovalov y Stefanos Tsitsipas, dejando asimismo en claro que tiene osadía ante grandes escenarios.
Un principio de partido a solicitar de Ruud, que se hallaba muy cómodo frente a la propuesta del danés, que apostaba a cerrar los puntos en pocos tiros, mas sin mucha precisión. El noruego procuraba muchas pelotas altas sobre todo del revés de su contrincante, y con eso hacía mucho daño. Casper halló dos quiebres de forma sucesiva para tomar un 5-0 de ventaja en el marcador. Sin dudas al servicio, Ruud cerró la primera manga por un concluyentes 6-1.
Otra vez retornaban los inconvenientes al saque para Holger, que aunque evitaba el quiebre en un comienzo, entonces no pudo hacerlo a fin de que el noruego se adelante por 3-2. Mas el propio danés recobró terreno al quebrar de forma inmediata, y con eso no solo emparejar el marcador, sino más bien asimismo darse un subidón de energía. Ahora Rune producía buenas sensaciones desde la devolución, y con esa desvergüenza, volvió a lograr un break para llevarse el set por 6-4.
El tercer parcial traería un nivel aún más alto de tenis, con los dos jugadores encontrando su mejor versión. Rune apostó a dar unos pasos atrás y plantarse para los ralis, por lo que asimismo llegaban grandes puntos para los dos. Otra vez Ruud pegaba primero al ponese break arriba 4-3, mas veloz el danés igualó el marcador. Todo muy igualado y la tensión iba en ascenso, aun con ciertas discusiones entre los jugadores. Sin aparecer quiebres definitorios, la historia decantaba en un tiebreak. En ese desempate, Ruud jugó más seguro y se llevó el parcial para quedar cerca de las semifinales.
Rune proseguía jugando muy suelto, prácticamente tal y como si no tuviese nada que perder, con aciertos increíbles mas asimismo con fallos en instantes esenciales. Un simple detalle iba a acotar el desarrollo del ser, tanto a fin de que danés lleve las cosas a una quinta parte set para que el noruego cierre el partido. Por último llegó el quiebre en un juego extenso, a fin de que Ruud después selle el triunfo con un 6-3.