Hungría - Inglaterra (1-0)

Hungría fue de nuevo tierra hóstil para Inglaterra, que comenzó la fase de conjuntos de la Nations League con una derrota por 1-0 en el Puskas Arena. Un estadio que debería estar cerrado por la UEFA mas que se llenó de menores que sisearon a los ingleses cuando se arrodillaron ya antes del comienzo del partido en memoria de George Floyd. Un episodio que recordó al vivido hace solo 9 meses en exactamente el mismo estadio, donde los jugadores negros de Inglaterra fueron víctimas de chillidos racistas y que forzó a la UEFA a sancionar a Hungría con 5 partidos a puerta vacía. Mas la federación húngara sorteó el castigo y reunió a más de 36.000 menores de 14 años y 3.600 acompañantes mayores de edad, que aparte de reproducir las precedentes conductas racistas, hicieron sonar miles y miles de vuvuzelas que desnortaron a los ingleses.

Siendo así las cosas, la selección de Southgate perdió tras 22 partidos invictos, o lo que es exactamente lo mismo, desde el 15 de noviembre de 2020. El fin de una enorme ráfaga para Inglaterra, a la que acorralaron las rotaciones: Coady, Justin y Bowen eran las novedades en un once que no supo de qué manera superar a Hungría, considerablemente más ambiciosa desde el principio.

A los 'Three Lions' les costaba dar continuidad a sus ataques y la que salía con más pelirgo era la selección local, que a la media hora ya había asomado en un par de ocasiones por el área de Pickford. El portero del Everton se sacó de encima un disparo de Nasty con riesgo y dejó respirar un tanto a Inglaterra, que cambió de planes tras el reposo.

Saka salió en la segunda mitad para revolucionar el partido, mas el que lo hizo fue Szoboszlai de penalti con un disparo cruzado raso para dar el 1-0 a Hungría. Tras el gol en contra, Inglaterra se aferró al balón parado para dar la vuelta al resultado, mas ni Coady ni Kane lograron enfocar bien sus remates y a Inglaterra se le atragantó Hungría. Una vez más.

TiroAlpalo